En lo que va de año, la Marina de Guerra del Perú, a través de la Comandancia General de Operaciones del Pacífico (COMOPERPAC) ha desarrollado un intenso Programa de Entrenamientos Operacionales destinados a incrementar y perfeccionar las capacidades de las fuerzas navales, consolidando la interoperabilidad entre sus unidades y proyectando una capacidad disuasiva con unidades navales entrenadas y listas para defender sus intereses marítimos como garante de la soberanía nacional y contribuir a la estabilidad regional en el Pacífico Sur.
De acuerdo con información recabada por defensa.com, uno de los relevantes fue RASEX (Replenishment at Sea Exercise) que se realizó con la Tercera Flota de la US Navy con sede en San Diego (California). Entre enero y abril, y después entre julio y septiembre, el Buque de Apoyo Logístico de Flota BAP Tacna (ARL-158), unidad capaz de operar en escenarios marítimos altamente exigentes, concretó 39 maniobras de reabastecimiento de combustible en el mar a más de 40 unidades navales, recorriendo un total de 12.257 millas náuticas, alrededor de 22.700 kilómetros.
Se transfirieron poco más de 4 millones de galones de combustible y se realizaron una docena de eventos de calificación de aterrizaje en cubierta (Deck Landing Qualification), permitiendo la integración operativa con helicópteros MH-60S Sea Hawk.
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Operación de reabastecimiento entre buques.
Entre enero y febrero, se realizó el Viaje de Instrucción al Litoral (VILIT-2025) con los cadetes de la Escuela Naval del Perú y los alumnos del CITEN (Instituto de Educación Superior Tecnológico Público Naval), dando lugar a una serie de entrenamientos que demostraron la flexibilidad de las fuerzas navales tanto en el despliegue rápido a lo largo de la costa norte, y en el sur del país, reforzando la presencia del poder naval en el litoral peruano.
En marzo se realizó el Entrenamiento Operacional Trueno y en abril el Hermes, ambos en la Zona Marítima Centro, maniobras que probaron la capacidad de las fuerzas navales para actuar en escenarios multidominio, combinando guerra de superficie y antisubmarina con operaciones anfibias, especiales y apoyo ante desastres naturales.
Después, entre junio y agosto se realizaron los Entrenamiento Operacionales Ares, Apolo y Vulcano orientados a fortalecer las tácticas de negación del mar y defensa de áreas estratégicas en el centro del litoral peruano. En el curso de Ares, se registró el disparo de un misil antibuque MM-40 Block III por parte de la fragata misilera BAP Bolognesi (FM-57) y dos Otomat MK-2 Block II/Mk-2 OTHT por las BAP Palacios (FM-56) y BAP Bolognesi (FM-58) contra un buque blanco que, sumamente dañado tras ser impactado, terminó hundiéndose poco después.
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Lanzamiento de misiles antibuque.
En el ámbito internacional, destaca la participación, entre el 15 de septiembre y el 6 de octubre, de la fragata misilera BAP Aguirre (FM-55) y del Submarino BAP Pisagua (SS-33) en el Ejercicio Multinacional UNITAS LXVI – 2025 realizado entre las bases navales de Mayport y Norfolk (Estados Unidos). Actualmente, el BAP Pisagua (SS-33) sigue desplegado participando en el Entrenamiento Binacional DESI/SUBDIEX 2025, debiendo retornar al Perú en 2026.
Otros eventos de relevancia del 2025 incluyeron visitas oficiales de unidades extranjeras, como el buque escuela español “Juan Sebastián Elcano”, el patrullero oceánico antártico HMCS Margaret Brooke (AOPV 431) de la Marina Real Canadiense, y el buque escuela Kashima (TV-3508) y el destructor Shimakaze (TV-3521) de la Fuerza Marítima de Autodefensa del Japón, los cuales contribuyeron a estrechar la cooperación naval y a proyectar una imagen de confianza y profesionalismo.
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Operación de asalto a un navío con el apoyo de helicópteros.
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Un buque de la Marina de Guerra del Perú navegando.







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