(defensa.com) Durante la ceremonia de cambio de mando del comandante General de la Marina ecuatoriana, (tras dos años en el cargo el Vicealmirante Luis Jaramillo deja su puesto al Vicealmirante Luis Santiago Chávez), Rafael Correa destacó que se ha invertido casi 6 veces más que durante los anteriores Gobiernos del país (2000-2006), cuyos ministros de Defensa fueron militares en servicio pasivo.
El Primer Mandatario recordó que el Gobierno Nacional destinó 1.718 millones de dólares para atender a las Fuerzas Armadas y rechazó públicamente los argumentos respecto a que no han sido debidamente atendidas, “pues con la Revolución Ciudadana se ha mejorado las condiciones laborales -aumentando las remuneraciones cinco veces más-, reforzando el equipamiento con la adquisición de 18 aviones subsónicos, 12 aviones supersónicos y 3 aviones logísticos Casa; además de la modernización para la Marina de Guerra y la Fuerza Terrestre”, detalló.
Correa reiteró sus críticas a quienes manejan un doble discurso en torno a los hechos del 30S, así como a aquellos que dicen que se pretende debilitar a las Fuerzas Armadas con la enmienda constitucional, “porque supuestamente queremos desviarla de su función primordial”. Lo que se busca, aseguró “es que tengan funciones complementarias de seguridad integral para el país. (…) Contribuir a dar seguridad a sus compatriotas que en última instancia son sus familias y su comunidad” subrayó.
Por su parte, el nuevo comandante general de la Armada, vicealmirante Luis Santiago Chávez, agradeció al Presidente de la República el apoyo brindado a la Armada del Ecuador facilitando que se materialicen varios proyectos como el incremento en la capacidad de disuasión de la Fuerza Naval a través de la modernización de dos submarinos, la repotenciación de tres lanchas y de tres corbetas, la adquisición de lanchas interceptoras y aeronaves no tripuladas, además de 4 guardacostas.
A la vez indicó que se ha modernizado los laboratorios y maestranzas, lo que permitirá brindar el soporte logístico necesario a la fuerza y disminuir la dependencia tecnológica del extranjero. El mejoramiento de la calidad de vida fue otro de los temas tratados por el nuevo comandante de la Armada, reconociendo la inversión realizada por el Gobierno Nacional para que el personal cuente con condiciones óptimas para desarrollar su tarea. El cambio de mando se produce mediante Decreto Ejecutivo No 533, que cumple lo que señala el artículo 31 de la Ley Orgánica de Personal de la Defensa Nacional respecto al cargo de comandante, que se ejerce por un período de dos años.
