Durante el estado de excepción que se decretó durante los primeros días de la crisis social chilena, que estalló el pasado 18 de octubre, las Fuerzas Armadas chilenas debieron salir a las calles apoyar a Carabineros en el control del orden público. En este contexto, quedó en evidencia la ausencia de una normativa sobre el uso de la fuerza por parte de las FF.AA. en estos contextos. Debido a ello, el Ministerio de Defensa ingresó a la Contraloría General de la República y decretó para su toma de razón sobre lo que se definió como las Reglas de Uso de la Fuerza (RUF) para las FF.AA.
Esa toma de razón ocurrió esta semana. Según detalló el diario La Tercera, el rol de la Contraloría General de la República fue realizar el control de legalidad, para verificar que el decreto supremo tuviera sustento jurídico, y de esa forma acotar el uso de la fuerza militar durante los estados de excepción y respetar los derechos fundamentales de los ciudadanos.
El medio añade que son nueve las reglas que definen el uso de la fuerza por parte de las FF.AA., siempre en estado de excepción, y donde la utilización de las armas de servicios de los uniformados sea siempre la última opción.
El decreto contempla, entre estas medidas, que el uso de las armas de fuego sea 'gradual' y que solo se utilicen cuando esté en riesgo la vida de los uniformados, como también cuando los cuarteles estén siendo objeto de algún atentado u ataque violento.
En estas reglas también se contempla que siempre los uniformados deben comenzar por intentar disuadir eventuales eventos violentos. En esos casos, contempla el decreto, el funcionario deberá primero optar por el diálogo con las personas que están haciendo los desórdenes, y si esto no funciona, optar por técnicas para disuadirlos, utilizando los elementos de los cuales disponen. (Pamela Squella, Santiago de Chile)
