Ahora, los trascendidos apuntan a que el titular brasileño de Defensa, adquiridos los Gripen para la FAB, luego de años postergando esa decisión y concitando expectativas diversas (e inclusive contradictorias) consideraría cumplido su período, encabezando la dependencia hacia julio próximo, una vez organizada la seguridad del Campeonato Mundial de Futbol, al respecto de cuya cobertura antiaérea, además, habría desentendimientos entre los proveedores rusos y el gobierno brasileño por los Pantsyr y las baterías Igla.
Además, recientes y graves denuncias-rebatidas- del diario carioca O Día contra el Comandante en Jefe de la Marina, Almirante Júlio Soares de Moura Neto, por supuestas malversaciones en el programa de renovación de submarinos y astilleros de sumergibles, PROSUB, comprobándose o no, complicarían aún más el panorama de la cartera, que hace poco enfrentó nuevos recortes presupuestales, frente a futuras adquisiciones y a programas de envergadura.
Además, en la incorporación de los Gripen se ha dado un clima de tirantez entre proveedores, e inclusive entre los radicados en Sao José dos Campos, en torno a Embraer y asociadas, y las nuevas unidades de Saab en Sao Bernardo do Campo, donde también existen otras industrias militares, encabezadas por la Thales- Omnisiys entre otras, parte de siderúrgicas especializadas y fábricas de electrónicos. Notoriamente, el alcalde de esa ciudad tiene un peso mayor en el oficialismo, que lo que su cargo indica a priori, pero fue uno de los políticos que inclinó la balanza a favor del Gripen, aeronave que incluso voló en Suecia (Javier Bonilla).