La Marina de Brasil asumió este martes el mando de la Fuerza de Tarea Combinada (CTF) 151 con la misión de coordinar fuerzas navales multinacionales en operaciones de lucha contra la piratería en una de las principales rutas marítimas mundiales, que incluye el Golfo de Adén, la cuenca somalí y el mar Arábigo.
Con un mandato que puede variar de tres a seis meses, el contraalmirante de la Marina brasileña Antonio Braz de Souza enfrenta el desafío de liderar los esfuerzos para garantizar la seguridad en una región que, además de casos de piratería, ha registrado recientes ataques a buques mercantes, llevados a cabo por los rebeldes hutíes de Yemen.
Esta es la tercera vez que Brasil comanda el CTF 151, que también trabaja para combatir la trata de personas y la pesca ilegal. Representa uno de los cinco brazos operativos del grupo de trabajo internacional Fuerzas Marítimas Combinadas (CMF), cuyas operaciones se extienden a la lucha contra acciones criminales y terroristas en un área de aproximadamente 3,2 millones de millas cuadradas de aguas internacionales, unos 8 millones de km2. con énfasis en el Mar Arábigo, el Golfo de Omán, el Golfo de Adén y el Mar Rojo.
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En el período del 19 al 24 de enero de 2024, la delegación del Comando de Operaciones Navales (ComOpNav) fue recibida por el Estado Mayor designado para integrar la Fuerza de Tarea Combinada 151, encabezado por el Contralmirante Antonio Braz de Souza.
A la delegación asistió el Vicealmirante João Alberto de Araujo Lampert, representante del Comando de Operaciones Navales en la ceremonia de transición del CTF 151.
Durante su estancia se llevaron a cabo varias actividades de gran relevancia, destacando las reuniones con el Combined Task Force 154, enfocado en Capacitación en Mejora de la Seguridad Marítima, y con el Task Force 59, enfocado en Sistemas No Tripulados e Inteligencia Artificial. (Javier Bonilla)
