La reunión que diariamente tiene lugar en la Casa Blanca estadounidense en torno a la gestión de la crisis del coronavirus en Estados Unidos derivó de forma inesperada en el anuncio de una gran operación militar contra el narcotráfico en la región del Caribe y el Pacífico Oriental.
En la rueda de prensa tras la reunión, los medios de comunicación esperaban un informe sobre las acciones del gobierno para frenar los efectos del coronoavirus, sin embargo, el presidente Donald Trump, flanqueado por el Secretario de Defensa Mark Esper y el Jefe de Estado Mayor Conjunto general Mark Milley, anunció el envío de “destructores, buques de guerra, aviones, helicópteros y buques de los Guardacostas, duplicando nuestras capacidades en la región del Caribe y el Pacífico Oriental para, en sus palabras, evitar que los cárteles de la droga se aprovechen de la situación actual.
Esta operación tendrá lugar en el área de responsabilidad del Mando Sur de los Estados Unidos (SOUTHCOM) y responde a informes de inteligencia que sugerirían que los cárteles mejicanos entre otros estarían aprovechando la situación actual en la que las agencias están centradas en el problema interior del coronavirus para incrementar los envíos de drogas a los Estados Unidos.
El Secretario de Defensa Esper afirmó que esta operación se enmarca en la lucha más amplia de la administración estadounidense contra los tráficos ilícitos a los Estados Unidos y la protección de los ciudadanos de esta lacra. Recordemos además que la Justicia de los Estados Unidos presentó la semana pasada cargos por narcotráfico contra el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, hasta el punto de ofrecer una recompensa de 15 millones de dólares por cualquier información que permita su captura. (José Mª Navarro García)
Fotografía: La rueda de prensa en la que el presidente Trump anunció la operación (Southcom)
Cartels, criminals, and other malign actors may try to exploit this time of crisis to threaten Americans.
— The White House (@WhiteHouse) April 1, 2020
President @realDonaldTrump won’t let that happen. pic.twitter.com/Zyvbf8msNE