.jpg)
El procedimiento contempla la adquisición de 22 mini UAV en un modelo de licitación abreviada, convocada para el próximo 8 de agosto, con un monto inferior a los 291.000 dólares, como marca la legislación del país, si no se opta por la variable ampliada, que podría orillar 1.700.000 dólares. Se tratará de unidades de tipo portátil, resistencia media a la oscilación del viento, con partes desmontables y maletín de transporte, que deberán contar con una cámara incorporada o asociada, con mando remoto de todas las características manejables (orientación, foco, zoom, formato, etc.), con una calidad de video mínima de HD.
Las dos cámaras (trasera y frontal), GPS, o cualquier carga útil deberán poder guardar los datos en una memoria alojada en el UAV. Opcionalmente, la memoria donde se guarda la información podrá ser extraíble, del tipo SD. También deberán poder tomar fotografías en forma individual o bien en simultáneo del grabado de video. La definición mínima exigida para las fotografías es de 10Megapíxel. Opcionalmente, el proveedor podrá cotizar cámaras de observación térmicas.
El UAV cotizado deberá contar con alguna certificación internacional y nacional, como la de la Unidad reguladora de Comunicación/URSEC, por la temática de radiofrecuencias y otras emisiones electromagnéticas. Además, deberá poder ser compatible con tecnología de telefonía celular, en una o más bandas, ( LTE 4G) y un sistema operativo superior a Android 6.0.1, con capacidad de transmitir por video-llamada. Su alcance deberá superar los mil metros y su autonomía, ampliamente los 20 minutos. Debe ser capaz de ejecutar un retorno a base automático ante la pérdida de señal o ante un comando del operador, esquivar obstáculos tales como árboles, edificios, etc.
Sus baterías tendrán una vida útil mayor a 60 horas / 200 ciclos de recarga (mandatorio). Deberá poder almacenar un registro de horas de vuelo y protocolo de mantenimiento. Su proveedor se encargará de la capacitación del personal afectado a su uso y mantenimiento. (Javier Bonilla)
