El Ejército de Nicaragua incorporó el Segundo Batallón de Tropas Navales, que ha recibido el nombre de “Subcomandante Mario José Alemán Escobar” y tiene su sede en Puerto Sandino, en la región de Nagarote. Su misión es actuar en aras de la seguridad y apoyo a la población ante situaciones de desastres naturales en los litorales, espacios marítimos, insulares, cayos y bancos adyacentes, aguas, interiores, mar territorial, zona continua y económica exclusiva y plataforma continental. Con la creación de la unidad, también se inauguraron sus instalaciones dentro de un complejo naval de casi 20 manzanas de extensión donde se ha construido una jefatura, edificios administrativos, dormitorios, auditorio, almacenes logísticos edificios de dos plantas, y una infraestructura de cerca de los 10 mil metros cuadrados de construcción. El complejo incluye plataformas de aterrizaje, y edificios de dos plantas, y todo realizado con un fondo de 960 mil dólares provenientes del Presupuesto general de la República.
El acto de ceremonia fue presidido por el comandante en jefe del Ejército, general Julio César Avilés, el embajador de Taiwán Jaime Wu, el mayor general Bayardo Ramon Rodríguez, jefe del Estado Mayor del Ejército, el inspector general del Ejército, mayor general Marvin Elías Corrales, y el jefe de la Fuerza Naval, Contralmirante Ángel Eugenio Fonseca Donaire. El embajador taiwanés aprovechó para hacer la entrega oficial de 5 lanchas rápidas recuperadas y repotenciadas con fondos de su país. La entrega de las lanchas se dio en el marco de convenio de cooperación entre Nicaragua y Taiwán y viene a fortalecer las capacidades de la institución y dar continuidad con el cumplimiento de la estrategia de Estado del Muro de Contención que lucha contra el narcotráfico y crimen organizado.
Se trata de 4 interceptores Nor-Tech 43V previamente donados por los EEUU en 2009 y que ya habían dejado de funcionar debido a la falta de presupuesto para mantenerlas. Estos navíos tienen una eslora de 43 pies, una viga de 9 y un borrador de 3. Su casco es de tipo profundo en V. Originalmente estaban propulsados por tres motores Yanmar 315Cv que proporcionaban hasta 50 nudos de velocidad, y un radio de acción de las 600 millas náuticas a 45 nudos. Son modelos de alta maniobrabilidad, y su diseño les permite girar de una cerradura a otra a toda velocidad con plena confianza de que se dirigirá en la dirección de su contacto lo antes posible. Las naves están diseñadas para la velocidad y maniobrabilidad en el océano y en aguas poco profundas, y su valor original fue de $450.000. Estas embarcaciones fueron entregadas con cuatro remolques para botes y camionetas Ford F450 Super Duty para tirar de ellos fuera del agua. Aparentemente sus sistemas originales no fueron remplazados sino repotenciados, pues el embajador taiwanés en Nicaragua explicó que las lanchas estaban en mal estado y que tras la cooperación de su país ahora están en perfecto estado. Los únicos detalles del quinto ejemplar dicen que se trata de un modelo de 48 pies de eslora, con capacidad de los 50 nudos, y aparentemente previamente capturado al narcotráfico.
Hay que recordar que recientemente llegaron al país las dos unidades de superficie 409, Soberanía I y la 411, Soberanía II al Puerto de El Bluff, y los que fueron adquiridos en Holanda. Para ello, las tripulaciones viajaron y fueron capacitados en Holanda, para luego hacer la travesía de 12 mil millas náuticas en 24 días. Estas embarcaciones permitirán patrullajes de hasta los 25 días. Todo esto en un gran refuerzo a la Fuerza Naval. (Julio Montes, corresponsal de Grupo Edefa para Centro América)
