La Marina brasileña ha solicitado formalmente su retirada de Líbano para concentrar medios y recursos humanos en América y África sudoccidental. A tales efectos ha hecho circular un comunicado en los siguientes términos: "La Marina de Brasil propuso al Ministro de Defensa, Gral. Fernando Azevedo, que la participación de un navío en FTM-UNIFIL culmine en diciembre de 2020, teniendo en cuenta los siguientes enfoques:
1) Política estratégica: La Política de Defensa Nacional (PND) y la Estrategia de Defensa Nacional (END) establecen como área prioritaria de interés el entorno estratégico brasileño, que incluye, como regiones marítimas, la Antártida y el Atlántico Sur, incluidas las Países de África occidental. Además, existe una creciente presencia de potencias extra hemisféricas en África y el Caribe en materia de seguridad y control marítimo, comercio e influencia militar, lo que indica la necesidad de revitalizar la Zona de Paz y Cooperación del Atlántico Sur (ZOPACAS).
2) Coyuntura: La coyuntura económica impone a la Fuerza Naval un escenario de recursos limitados y, en este contexto, es necesario priorizar algunas iniciativas.
3) Análisis de eficiencia: Las ganancias políticas y operativas y el esfuerzo logístico necesarios para mantener un navío militar durante ocho meses lejos de su base indican la necesidad de una re orientación de este empleo en nuestro entorno estratégico.", finaliza el mensaje del alto mando naval.
Brasil ha estado al mando de la Fuerza desde 2011. La Marina mantiene un helicóptero orgánico a bordo de su unidad, al mando de los activos navales de otros cinco países, para patrullar la costa libanesa, evitar la entrada de armas ilegales y mitigar el contrabando en el país. El efectivo brasileño también contribuye al entrenamiento de la Armada libanesa, para que la institución pueda realizar sus deberes de manera autónoma. La misión cuenta con un Estado Mayor multinacional y seis buques, además del brasileño, de Alemania, Grecia, Turquía, Bangladesh, e Indonesia. Actualmente hay 215 miembros de la Armada brasileña sirviendo en la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas en el Líbano. Hoy, 35 países -incluido Brasil- participan en esta Fuerza: 12.000 militares y policías, así como también funcionarios civiles. (Javier Bonilla, corresponsal del Grupo Edefa en Brasil)
