Casi 1.200.000 dólares ha donado el gobierno de Estados Unidos a Uruguay en equipamiento para reforzar la alicaída capacidad de combatir incendios del país, enfrentado a una inusual sequía, habiéndose producido en los últimos 30 días multitud de incendios rurales, por ahora controlables, si bien existe un riesgo de expandir su extensión muy alto.
La donación está enmarcada en la celebración del 70 aniversario del primer acuerdo de cooperación en defensa entre Estados Unidos y Uruguay, ratificado en 1953 y supone un «importante apoyo» para el combate a los incendios.
El oficial Superior del Departamento de Defensa, coronel Gary Symon, confirmó que en 2023 Estados Unidos, a través del Programa de Asistencia Humanitaria (HAP, en inglés) del Comando Sur, donará a Uruguay más de un millón de dólares en equipamiento humanitario y de seguridad», acota el documento.
Según Symon, ese equipamiento incluirá 120 trajes de protección contra incendios y 40 equipos de respiración autónoma para facilitar “que los bomberos uruguayos estén preparados de forma segura para llevar a cabo su misión en entornos rurales y urbanos. Además, facilitaremos la llegada de cuatro generadores de oxígeno de última generación a hospitales locales para que puedan salvar vidas a quienes necesiten apoyo respiratorio», acotó el coronel.
Según recoge el comunicado, con el fin de combatir el fuego y mitigar los efectos la crisis climática, la Embajada de EE.UU. en Uruguay donará cuatro sistemas nuevos de bambi bucket para el transporte de agua que, declaró el oficial, «permitirán mejorar la capacidad de extinguir incendios desde helicópteros en cualquier punto del interior del país».
En las semanas anteriores, tanto los Bomberos, como el Ejército, y la Fuerza Aérea, tan sólo con uno o dos helicópteros UH-1H disponibles, han debido redoblar esfuerzos para dominar diversos focos ígneos. La Aviación Naval, por su parte, dispone solo de un Bambi Bucket para sus Bell 412. (Javier Bonilla)
