El primer F-16 pintado como un Su-57 ruso de la empresa de aviones agresores Top Aces

La empresa canadiense Top Aces, que da servicio de aviones agresores al Departamento de Defensa de Estados Unidos, entre otros clientes, ha pintado uno de sus aviones de combate F-16 con el esquema de pintura que utilizan los cazas rusos Su-57.

Uno de sus aviones de combate General Dynamics (actualmente Lockheed Martin) F-16A Netz, en concreto el matriculado N871TA, surcó los cielos por primera vez con una nueva combinación de colores basada en el caza furtivo ruso Sukhoi Su-57, o Felon según el código OTAN, un avance que va mucho más allá de un simple cambio estético.

El avión de combate “agresor”, que en su día sirvió en la Fuerza Aérea de Israel y ahora está estacionado en la base de Mesa Gateway (Arizona), donde Top Aces realiza el mantenimiento de su flota de F-16, lucía un camuflaje angular de baja visibilidad en tonos grises, que reflejaba la filosofía facetada y difusora de radar que aplican los rusos a parte de sus modernos aparatos de 5ª generación Sukhoi Su-57.

Destacan en el esquema de pintura las estrellas rojas que luce en la cola y los planos, que la Fuerza aérea de Rusia o VVS (Voenno-vozdushnye sily) heredó de la desaparecida URSS (Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas). Además, luce el numeral, de apreciable tamaño y pintado en rojo, 284, y en la parte superior del estabilizador vertical la inscripción en cirílico «Опыт Важен»  (“La experiencia importa”), que es todo un guiño al objetivo de Top Aces: ofrecer a los pilotos estadounidenses y aliados la simulación de amenazas más realista posible.

Formación de Su-57, en el que se aprecia el esquema de pintura replicado por Top Aces en sus F-16 matrícula N871TA.

Otra cosa curiosa, que se aprecia en la parte delantera izquierda del fuselaje, es la marca de derribo de un avión de combate Mikoyan MiG-23 sirio, obtenido en septiembre de 1981 cuando operaba con la Fuerza Aérea de Israel, que es a quien compró Top Aces un total de 29 aviones F-16, como ya publicó en su momento defensa.com.

La lógica de aplicar este esquema de pintura enemigo se basa tanto en el éxito psicológico como en el operativo que ofrecen estos aviones agresores a los pilotos que se están enfrentando, para entrar lo más posible en un ambiente hostil. Keith Ferris, un conocido diseñador de esquemas de pintura para aviones de combate, señaló: «La idea es engañar a la vista, de modo que, incluso cuando el enemigo te ve, nunca pueda estar seguro de qué parte de tu aeronave está mirando o cómo está orientado tu avión en el cielo». El camuflaje del Su-57, ya sea con patrones digitales «fantasma» o con fragmentos geométricos, tiene como objetivo alterar el contorno del avión y minimizar su detectabilidad a distancia, un principio que ahora se refleja en al menos este F-16 de Top Aces.

La empresa  está especializada en proporcionar servicios de adversarios aéreos o ADAIR (Adversary Air), para diversas fuerzas aéreas, como es la Fuerza Aérea de Estados Unidos o USAF (United States Air Force). La compañía opera sus F-16 en favor de la base aérea o Air Force Base (AFB) de Eglin, una instalación de la USAF en Florida, donde su mando de entrenamiento y educación aérea o AETC (Air Education and Training Command) forma a los pilotos de los futuros de Lockheed Martin F22A; y los F-35A, que en pocos años será la espina dorsal de esta poderosa aviación.

Además, con sus F-16 Top Aces también proporciona servicios de aviones agresores en la base aérea de Luke (Arizona), donde el AETC también tiene basados F-35A, donde este mes de agosto se han obtenido varias imágenes del F-16 N871TA. (Julio Maiz)