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Un helicóptero de la Guardia Nacional de México (GN) fue atacado el pasado viernes 16 de abril por tiradores del Cártel de Sinaloa (CDS) en el norteño estado de Sonora, cuando apoyaba operaciones de traslado de material asegurado. El UH-60M Black Hawk, matrícula GN-108, fue tiroteado desde tierra con fuego de ametralladoras automáticas, el fuselaje recibió al menos ocho impactos, uno de ellos de un fusil M-82 Barret, calibre 50.
La aeronave forma parte de la Tercera Escuadrilla de Vigilancia Aérea de la GN y estaba en operaciones de reconocimiento y apoyo aéreo en la localidad de El Claro, en el municipio de Santa Ana, Sonora, en donde se registró un operativo contra grupos de la delincuencia organizada.
El Black Hawk sobrevolaba el lugar y se le ordenó apoyar con el traslado de material asegurado. La nave regresó a la localidad luego de haber descargado el material y cuando comenzaba a violar a baja altura fue atacada a tiros.
De acuerdo con fuentes militares, las ráfagas impactaron en la cola y parte del fuselaje del aparato perforando tubos de alimentación partes de la estructura. No hubo heridos y el aparato logró elevarse y salir de la zona de ataque para regresar al hangar de la Tercera Escuadrilla de Vigilancia Aérea de la GN.
El Black Hawk llevaba una tripulación integrada por piloto, copiloto, un Ingeniero de Vuelo, dos Artilleros, dos integrantes de la Guardia Nacional y dos de la Policía Estatal de Sonora.
El UH-60M portaba dos ametralladoras automáticas M-60, una en cada lado del fuselaje, con las que se respondió al ataque.
La Guardia Nacional cuenta con una flota aérea de 35 aparatos: 10 UH-60M Black Hawk, 5 Mi-17, 5 Ecureuil AS-355, 2 Boeing 727, 2 aviones CASA C-235 y un Súper Puma, varios turbohélices Cessna-182 y un avión Grumman Gulfstream. (Jorge Alejandro Medellín)
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