El Ejército de Tierra (ET) español tiene en marcha numerosos programas de reequipamiento para satisfacer las necesidades de distintas unidades. Hace ya bastantes años, en unos ejercicios que la Brigada “Almogávares” IV de Paracaidistas -entonces no tenía ese nombre pero si sus siglas, BRIPAC- realizaba en las instalaciones del Centro Nacional de Adiestramiento de San Gregorio, se me informaba de la voluntad de adquirir blindados 4x4 ligeros para ellos, por aquel entonces se buscaban los Panhard M11.
Años después, en una visita a la Academia de Caballería de Valladolid, volví a escuchar la voluntad de incluir en sus activos un nuevo blindado ligero destinado a determinadas unidades de carácter expedicionario. Hoy, el tema vuelve a surgir. Sobre el que ahora se conoce como Vehículo de Exploración Aerolanzable (VEAC) se comentan distintos detalles en el último número del Memorial de Caballería. El Regimiento de Caballería Lusitania 8 focaliza su actividad en beneficio de la BRIPAC y le aportará grupos de Caballería Paracaidista. En ese sentido, con las últimas adaptaciones orgánicas del 1 de enero de 2021, pasa a tener tres Escuadrones Ligeros Acorazados (ELAC), un Escuadrón Acorazado (EAC) y un Escuadrón de Plana Mayor y Servicios (EPLMS) que están acompañados de una plantilla que se define como de transición.
En un proceso que durará hasta el 2023 sus blindados 6x6 del tipo Vehículo de Exploración de Caballería (VEC) 6 se ha previsto sean reemplazados por los más compactos 4x4 VAMTAC ST5 de Urovesa, material que sería el que daría la cobertura a unos escuadrones de tipo ligero (ELIG), conservando sus 8x8 Centauro con cañón de 105mm dentro de su EAC. La idea que se buscaría conseguir sería aprovechar la capacidad del ST5 en lo que es su blindaje y movilidad, e impulsar el hecho de que puede ser llevado como carga exterior en helicópteros CH-47 Chinook y transportado en los Airbus A400M del Ala 31 de Zaragoza. Desde estos últimos, pueden incluso lanzarse en paracaídas o proyectarse en operaciones de asalto aéreo.
Como se requiere de ese VEAC y no hay previsión económica para la adquisición de un modelo, surge la propuesta de aprovechar el VAMTAC ST5 y transformarlo de forma conveniente. La idea propugna incorporar en ellos una torre con cañón automático de 20 mm que le aportaría un volumen y potencia de fuego considerable y lo mantendría dentro de un tamaño y peso que facilitase su despliegue en lanzamientos paracaidistas. Urovesa ya ha validado en su vehículo esa posibilidad y hay empresas, como Escribano M&E, que también han presentado proyectos similares y que están en disposición de fabricar ese montaje en España.
Sería más que interesante, y muy rentable desde el punto de vista económico, propugnar la transformación de vehículos que ya se tienen por parte de la Industria nacional; además del cañón de 20mm sería bueno integrarles una solución de exploración y vigilancia que sea similar a la de los VERT (Vehículo de Exploración y Reconocimiento Terrestre) ya en servicio. Con poco presupuesto y en tres o cuatro anualidades se podrían transformar una treintena o más de los ST5 en VAEC y así cubrir las necesidades de la Caballería paracaidista. (Octavio Díez Cámara)
Fotografía: Concepto presentado por Escribano que podría ser una solución especialmente válida de la industria nacional para dar cobertura a la necesidad de contar con el VAEC en la BRIPAC.
