Para sustituir a sus veteranos aviones de investigación C212, el gobierno autorizó en diciembre de 2021 al INTA la celebración de un contrato para el desarrollo de una Plataforma Aérea de Investigación (PAI), por importe de 27 millones de euros, como publicó defensa.com. Es el C295 que hemos podido ver en las instalaciones de Airbus Defence & Space de San Pablo (Sevilla).
El nuevo avión de investigación del Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial (INTA) operará con su matrícula militar, que será TX.21-14 10285 (la T por transporte y la X por experimental), que figura en ambos lados de su estabilizador vertical, desde la base aérea de Torrejón (Madrid), donde tiene su principal sede.
El C295 será la plataforma PAI, consiguiendo la estandarización con las 12 unidades similares con las que cuenta el Ala 35 del Ejército del Aire y el Espacio en su cercana base madrileña de Getafe. Estamos ante una aeronave convenientemente adaptada e instrumentalizada para su uso en diversas áreas científico-tecnológicas, entre otras: realización de ensayos en vuelo de equipos y sistemas aeronáuticos, investigación atmosférica, la toma de datos de teledetección, pruebas para el desarrollo, adiestramiento y formación de tripulaciones tanto de vuelo como científicas y calificación de nueva instrumentación científica.
El INTA “Esteban Terradas” es un organismo autónomo del Gobierno de España con la consideración de organismo público de investigación, adscrito a la Secretaría de Estado de Defensa del Ministerio de Defensa, que desde su creación en 1942 tiene como director a un general del Ejército del Aire y del Espacio, que es actualmente Julio Ayuso Miguel.
La aeronave se encargó con la cofinanciación a través del Fondo Europeo de desarrollo regional (FEDER) en el marco de la convocatoria realizada por el Centro de Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI), adscrito al Ministerio de Ciencia e Innovación, con la finalidad de financiar iniciativas científico-tecnológicas en el ámbito del sector público para promover la ejecución de proyectos de I+D+I para generar capacidades científico-tecnológicas que repercutan en el conjunto de la sociedad, según se recogía en el Consejo de Ministros de diciembre de 2021. (Julio Maíz Sanz)
