El Consejo de Ministros del pasado 28 de marzo autorizó la celebración de un acuerdo marco para adquirir retroexcavadoras de alta velocidad capaces de acompañar a las tropas por un valor estimado de 27,4 millones de euros.
Según refleja la referencia de dicho Consejo de Ministros “con la adquisición de estas máquinas se mejoran y refuerzan las capacidades de las Unidades de Ingenieros del Ejército de Tierra, en la realización de sus funciones de apoyo a las Unidades de maniobra de las Fuerzas Armadas en el combate de movilidad y contramovilidad y de fortificación.
En la actualidad estas capacidades y funciones se desarrollan mediante máquinas retroexcavadoras diseñadas para el ámbito civil y adaptadas o "customizadas" en lo posible para ofrecer una mayor protección. Sin embargo, las prestaciones de estas "máquinas retroexcavadoras adaptadas", especialmente su baja velocidad, dificultan la movilidad táctica en las zonas de operaciones donde las Fuerzas Armadas tienen desplegados contingentes y su adecuada interacción con las fuerzas aliadas que puedan participar en dichos despliegues, especialmente en las misiones en el extranjero.
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En el centro, una de las JCB HMEE expuesta durante una visita de la ministra de Defensa al Mando de Ingenieros en 2020 (Ministerio de Defensa)
La HMEE de JCB
Recordemos que el Ejército de Tierra ya inició la adquisición de este tipo de maquinaria especializada en 2017 y que las dos primera llegaron en 2018.
Aunque la licitación aún no se ha puesto en marcha, es de prever que se continue con la adquisición del modelo ya en servicio, uno de los pocos disponibles en el mercado para esta especializada tarea, que combina tanto la pala frontal como el brazo posterior, con la adopción de blindaje y una velocidad próxima a los 100 km/h.
La JCB HMEE (High Mobility Engineer Excavator) es el resultado de un requerimiento del Ejército estadounidense, posee una velocidad máxima de 96 km/h por lo que puede mantener el ritmo de un convoy (a pesar de su peso de 16 toneladas), puede remolcar hasta 5 toneladas y puede ser transportada en aviones militares. En un C-17 entra sin preparación y si se retiran las ruedas posteriores y se instala un eje doble especialmente diseñado, puede entrar en un C-130 Hércules.
Puede emplear combustible convencional o específicos militares como el JP8 o el F34 y dispone de cabina con aire acondicionado. El fabricante ofrece tres niveles de protección, habiéndose decantado el Ejército de Tierra por el denominado “Kit B” con protección integral y cristales blindados en cabina.
La adquisición, que ya adelantamos en abril de 2017, se correspondería con una de las máquinas de la empresa británica JCB a la que Walkia representa en la zona centro de España. Se trata de dos retroexcavadoras blindadas del tipo JCB HMEE con un precio unitario de 556.000 euros, precio que si se mantiene o mejora en la nueva adquisición permitiría adquirir 50 unidades.
Esta maquinaria especializada ofrece a los ingenieros de Ejército de Tierra nuevas capacidades para el acompañamiento de convoyes y la limpieza de rutas en zonas de riesgo en las misiones internacionales en los que participa.
La retroexcavadora ha sido adaptada a los requerimientos del Ejército de Tierra, incorporando todas las especificaciones solicitadas, entre ellas las de comunicaciones estandarizadas, lo que las convierte en unas de las más polivalentes del mercado. (José Mª Navarro García)
