En la base aérea de San Isidro, el Comando de Mantenimiento Aéreo de la Fuerza Aérea de República Dominicana (FARD) entregó tres aviones Flying Legend TP-75 Dulus, aeronaves que fueron adquiridas por la nación quisqueyana en 2023 para realizar misiones de vigilancia y entrenamiento básico avanzado.
Con la recepción de estos tres nuevos TP-75 Dulus, que serán asignados al Escuadrón de Combate “Dragones”, la Fuerza Aérea de República Dominicana suma ya 5 aeronaves, o lo que es lo mismo, la mitad de la flota negociada con la compañía italiana Flying Legend, fabricante de esta versión deportiva del Tucano, réplica del modelo del avión de entrenamiento y ataque ligero Embraer EMB-314. Hasta ahora esta aeronave ligera civil solo es operado en el sector militar por los dominicanos.
Los tres nuevos modelos que fueron entregados, registros FAD-7502 /FAD-7503 /FAD-7504, llevan el mismo esquema de pintura de los dos primeros, en dos tonalidades de grises, siendo este el más predominante en la mayoría de las aeronaves de ala rotatoria y ala fija de la Fuerza Aérea dominicana.
El programa TP-75 Dulus
El programa TP-75 Dulus se encuentra liderado por el Comando de Mantenimiento Aéreo de la Fuerza Aérea de República Dominicana con la asistencia de la compañía fabricante, Flying Legend, y como proveedor internacional la austriaca Rotax, que provee el motor, todas participan en este proyecto desde el 2023 para el ensamblaje de los 10 aviones que serán destinados para realizar misiones de reconocimiento, vigilancia y entrenamiento.
De acuerdo con las más recientes declaraciones de los Mandos superiores de la FARD durante la ceremonia principal del 77 aniversario, en febrero pasado, en lo concerniente a la fecha de entrega de las otras cinco unidades, que aún se encuentran a la espera por terminal su ensamblaje, se confía que sean entregadas en el transcurso de este año y del próximo, ya que el armado de cada aeronave toma aproximadamente 2.000 horas hombre.
El avión biplaza monomotor TP-75 Dulus, que significa cigua palmera en latín, está fabricado en aluminio y la versión dominicana se encuentra equipada con un motor austriaco Rotax 915iS de 141 hp y una hélice de paso variable de cuatro palas que le permite alcanzar una velocidad de 287 km/h y una autonomía máxima de 1.166 km, aunque este avión ha sido concebido como avión de turismo deportivo, también podría ser usado para tareas de entrenamiento o patrullaje, al serle adaptado cámaras termográficas flir y otros sensores de vigilancia y reconocimiento electrónico.
En el caso de la Fuerza Aérea de República Dominicana, ha solicitado al fabricante que las unidades adquiridas para su uso militar sean modificados para poder ser dotadas de algún armamento ligero como ametralladoras o cohetes los cuales podrían ser acoplados en sus dos únicos soportes alares, en los que actualmente les han sido adaptado tanques de combustible. (Bernardo de la Fuente)
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