En un contexto de reforzamiento de seguridad a lo largo de las fronteras entre ambos países, marcados por la incursión del ejército maliense y las fuerzas rusas de Wagner en el territorio mauritano y la toma de varios pueblos mauritanos en las últimas semanas, el Ejército de Mauritania concluyó la pasada semana ejercicios militares en su frontera oriental con Mali.
El Ejército informó que el objetivo era evaluar la preparación operativa de las unidades combatientes, involucraron así a fuerzas especiales, artillería, sistemas antiaéreos, lanzacohetes y aviones de combate. Se probó la cooperación y coordinación entre diferentes tipos de armas en escenarios de combate, simulando la destrucción de un enemigo ficticio que intentaba infiltrarse en el territorio nacional con el fin de llevar a cabo acciones hostiles. También se probó la eficacia del sistema de lanzacohetes de 107 mm, perteneciente a la Artillería, así como el disparo de baterías de artillería pesada tipo Howitzer de 122 mm.
Estos ejercicios se llevan a cabo en respuesta a las incursiones del ejército maliense y las fuerzas de Wagner en varios pueblos fronterizos mauritanos, donde han arrestado a ciudadanos mauritanos, destruido sus propiedades y herido a algunos de ellos. Durante la primera semana de abril, Mauritania acusó al ejército maliense y a sus aliados rusos de perseguir combatientes dentro del territorio mauritano y de haber entrado al pueblo de Fassala, en el extremo este de Mauritania, durante la persecución de combatientes del movimiento separatista "Azawad", lo que llevó a Bamako a enviar una delegación de alto nivel a Nouakchott en un intento de rebajar tensiones.
Mauritania y Mali están unidos por la frontera terrestre más larga de la región, 2.237 kilómetros de longitud, la mayoría de los cuales están en un desierto árido, donde operan a lo largo de la frontera muchas organizaciones calificadas como radicales o separatistas, incluida la rama de Al-Qaeda en el Magreb Islámico y el movimiento Azawad. (Alex Ribeiro)
