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Viernes, 19 de abril de 2024 Iniciar Sesión Suscríbase

Sembrando minas desde el cielo, el Air Volcano

El empleo de minas en conflictos armados quizá sea una de las tareas menos populares de las que se contemplan en los conflictos militares, básicamente porque una vez terminados los enfrentamientos militares, a menudo los campos permanecen minados y es la población civil la que sufre la mayoría de sus efectos.

En las operaciones militares el empleo de minas antipersonal (que no antipersonas) y anticarro son un recurso que se emplea principalmente para negar el espacio al adversario, condicionando los movimientos de este tanto a pie como mecanizados por determinados entornos o bien ralentizándolos cuando se enfrentan a la tarea del desminado.

Una manera rápida de establecer un campo minado en un área próxima al adversario es instalar lanzadores de minas en vehículos terrestres, que a lo largo de una ruta van lanzando una combinación de minas antipersonal y anticarro. Menos habitual es ver es realizar esta tarea desde una aeronave en vuelo, pero el sistema estadounidense M-139 Volcano está diseñado para ello.

En concreto, el M-139 Air Volcano es la versión diseñada para instalarse en un helicóptero utilitario UH-60 del Ejército de Tierra estadounidense para dispersar minas y crear de forma rápida campos minados. Se trata de una adaptación del sistema M-139 desplegado inicialmente desde camiones, pero que con motivo de unas imágenes recientemente publicadas por el Departamento de Defensa estadounidense, analizamos en mayor profundidad.

En este caso las imágenes se referían a este sistema instalado en un Blackwhawk que realizó una misión de entrenamiento en un campo de pruebas en Hawái a cargo de soldados de 2º Batallón, 25ª Brigada de Aviación de Combate de la 25º División de Infantería.

Originalmente montado en camiones de cinco toneladas del tipo M939 o de transporte del tipo M979, el Air Volcano es capaz de lanzar 960 minas en una única salida. Para ello se adosan a los costados del helicóptero cuatro módulos de lanzamiento cada uno dotado de 40 módulos que en su interior portan seis minas. De esta manera se pueden crear un campo de minas con una densidad de casi una mina (0,9) por metro cuadrado.

Se pueden montar dos tipos de contenedores M-87 con minas antipersonal o anticarro. El M-87 porta en su interior una mina antipersonal y cinco minas anticarro mientras que el M-87A1 incluye seis minas anticarro. Estas se programan para su autodestrucción pasado un plazo de tiempo que puede ir de 4 horas a 15 días.

Con un peso de casi 3 toneladas, el M-139 Air Volcano pone al Blackhawk al límite de peso y además la configuración con los lanzadores sujetos por el sistema ESSS (External Stores Support System) impide emplear las ametralladoras M-60D para autoprotección, por lo que durante estas misiones es escoltado por helicópteros como el AH-64 Apache.

Este sistema puede emplearse para crear rápidamente campos de minas en el interior del territorio enemigo, reforzar campos de minas ya existentes o proteger el flanco de las tropas propias mientras avanzan por ejemplo. En el interior del helicóptero un operador se encarga de activar los lanzamientos desde un panel de control eléctrico que controla la cadencia del lanzamiento de minas desde  sus contenedores. Estos tienen en su interior las minas asociadas a una carga propulsora que las lanza hasta a 70 metros de distancia del helicóptero. La altura mínima de vuelo es de 1,5 metros. (José Mª Navarro García)

Fotografía: La imagen recientemente publicada (US DoD)

Un Blackhawk con los paneles en los costados, en este caso sin contenedores (US Army)

Detalle de dos paneles laterales, en este caso a media carga (US Army)

Primer plano de uno de los módulos, sin contenedores, en el costado del helicóptero (US Army)


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