(defensa.com) “Por su solidaridad sin límites, piden reconocimiento por su trabajo silencioso en tierras lejanas, donde desplegados en tres continentes asolados por el flagelo de la guerra representan dignamente a nuestro país. Piden reconocimiento por su incesante aporte a la salud y a la educación nacional. Por estar siempre junto a los más frágiles cuando más lo necesitan, piden que no se los humille, que no se los desprecie con soberbia, piden que no se los denueste por prejuicios del pasado”, así se expresó el Comandante en Jefe de la Fuerza de Tierra uruguaya, Gral. Guido Manini Ríos, en el acto que conmemora el Día del Ejército, en presencia del presidente Tabaré Vázquez y figuras de la oposición (incluidos ex mandatarios). La fecha recuerda la Batalla de Las Piedras, cuando las milicias entonces rebeldes, lideradas por José Artigas, derrotaron un contingente español, encabezado por el capitán José Posadas en la localidad de Las Piedras, el 18 de mayo de 1811.
"En un mundo convulsionado y violento el Ejército se prepara para la defensa de la comunidad", afirmó Manini, agregando que la institución seguiría “en marcha [...] neutralizando a los agentes del odio y la discordia”, en un contexto dentro del cual el propio ministro de Defensa, Eleuterio Fernández Huidobro debió admitir, en conferencia de prensa inmediatamente posterior, que la “estigmatización” que sufren los miembros del cuerpo militar es “organizada”, y que de ellas participan tanto organizaciones sociales como sectores del oficialismo.
Estos sectores se muestran particularmente intolerantes y agresivos en relación a episodios del pasado gobierno militar, acaecidos hace más de 30 años, con lo cual han desgastado constantemente la imagen de las Fuerzas Armadas uruguayas, la cual recupera estima en la población cuando estas actúan eficazmente para paliar desastres naturales o contra consecuencias de conflictos sindicales radicalizados, como pueden serlo los periódicos enfrentamientos de los gobiernos locales con recolectores de residuos, tarea que, provisoriamente asumen los militares, así como las de Búsqueda y Rescate, o combate a incendios forestales, aún con total modestia de medios. Además, militares uruguayos integran, con solvencia, cuerpos de paz en Sinaí, Haití, Congo, o misiones de observación en diversos puntos del planeta, comenzando por la de Cachemira, con más de medio siglo de duración. (Javier Bonilla)
