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Jueves, 28 de marzo de 2024 Iniciar Sesión Suscríbase

Francia y Rusia estarían ya negociando la cancelación del programa Mistral

(defensa.com) Francia y Rusia estarían negociando ya la cancelación del programa de buques portahelicópteros de la clase Mistral según publican medios de comunicación rusos. Dos factores estarían condicionando la resolución de este conflicto, por un lado se tiene que alcanzar un acuerdo en términos económicos pero por otro lado Francia quiere poder exportar los buques a terceros países, algo a lo que Rusia se opone en principio.

El diario Kommersant cita fuentes del gobierno ruso que afirman que Francia habría hecho una propuesta a Moscú según la cual se devolverían a Rusia 756 millones de euros y se recibiría a cambio el visto bueno para la exportación a terceros de los dos buques. Esta propuesta habría sido rechazada por el Kremlin que reclama un pago de al menos 100 millones de euros más. En cualquier caso, el gobierno ruso ha calculado que la cancelación del suministro del “Vladivostok” y el “Sebastopol” le supondría un coste de 1.154 millones de euros. Moscú además se opondría a la reexportación de los dos buques si no se llega a un acuerdo sobre la cuestión de la indemnización económica.

Ante la posible suspensión del contrato, Rusia ya advirtió a través de su viceministro de Defensa que el gobierno galo deberá hacer frente al pago de las pérdidas que pueda suponer para Moscú la cancelación de este acuerdo, además de lo que pueda significar en términos de “reputación” y “credibilidad” para Francia como socio internacional. DCNS se enfrenta a una sanción que en un primer momento se traduciría en una indemnización por incumplimiento del contrato de 1.050 millones de euros.

Sin embargo a esta cifra habría que sumar aproximadamente 1.800 millones de euros en el caso de que una eventual sentencia judicial valore todas las repercusiones sobre el cliente y los socios industriales rusos, con lo que el total de penalizaciones rondaría los 3.000 millones de euros. Este importe estaría justificado por los gastos en que habrían ya incurrido los astilleros rusos para completar la parte de la construcción que le fue encomendada, así como los costes en que han incurrido por el transporte de los bloques que fueron construidos en Rusia y enviados a Francia para su montaje. (J.N.G.)


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