(defensa.com) El décimo aniversario del despliegue del Ejército de Chile en la Misión de Estabilización de Naciones Unidas en Haití (MINUSTAH) dio motivo a la realización de un seminario organizado por el Ejército en el cual se analizó la labor realizada, las lecciones aprendidas y el futuro de la presencia de Chile en Haití. Al cerrar el seminario el Ministro de Defensa señaló que las operaciones de paz en general son y seguirán siendo parte relevante del quehacer profesional de las Fuerzas Armadas chilenas, pues “nos sitúa como una nación que no vive al margen de lo que ocurre en el mundo, que al amparo de la ONU está dispuesta, previo legítimo análisis, a colaborar en misiones que busquen el restablecimiento de la paz, de la vigencia de los Derechos Humanos, del derecho democrático de los pueblos”
Respecto al futuro de la misión en Haití el mismo Ministro fija sus expectativas del siguiente modo: “Es evidente hoy que la situación en Haití presenta avances relevantes, las que incluso han permitido a Naciones Unidas elaborar un Plan de Consolidación –hoy en ejecución-, cuyas previsiones sobre la disminución del contingente militar incluso se han acelerado. En este contexto, los años 2014 y 2015 deben entenderse como la preparación de un retiro sustantivo, en el seno de la ONU, de fuerzas militares y un fortalecimiento de las tareas civiles de la misión. ”
Un ejemplo de las capacidades que ha alcanzado el Ejército de Chile en la preparación del personal que despliega en Haití lo constituye el entrenamiento del Batallón Chile XXIII denominación que recibe la unidad que partirá el próximo 29 de abril a Haití. El batallón compuesto por 144 efectivos de los cuales cinco son mujeres, acaba de culminar un período de siete semanas de intenso entrenamiento que contempló un período de adaptación, instrucción común, específica y etapa administrativa. La unidad se instruyó en tres capacidades nuevas: entrenamiento antidisturbios, efectuado por Carabineros de Chile, de reacción y aeromóvil, además de una fase de reentrenamiento.
Todo este trabajo se realiza en el Centro de Entrenamiento de Operaciones Internacionales (CENTROPI) que el Ejército tiene en el sector de Peldehue cerca de Santiago y en donde también funciona la Brigada de Operaciones Especiales. Como parte de la evaluación final del alistamiento logrado por el Batallón Chile XXIII se realizó un ejercicio que incluyó simulación de bloqueo de la ruta de un convoy militar por parte de civiles que obliga a un proceso de negociación con el Comandante de la escolta del convoy. Al fracasar la negociación interviene la unidad antidisturbios del Batallón, quienes aplicaron técnicas para controlar individuos que pasen los límites del orden público, permitiendo con esto el avance del Convoy. Posteriormente se ejecutó un procedimiento de "Check Point" con una instalación operada por personal militar y policial, quienes deben detectar elementos ilegales realizando control, inspección y registro de personas y vehículos. Finalmente el Batallón recibió la misión de desalojar una edificación, actividad planificada y ejecutada por un pelotón, debiendo considerar para esto las Reglas de Enfrentamiento, con el fin de no excederse en el uso de la fuerza. (Roberto Sandoval, corresponsal de Grupo Edefa en Santiago de Chile)
