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Jueves, 28 de marzo de 2024 Iniciar Sesión Suscríbase

Gaspar de Portola y Rovira, un militar del siglo XVIII que se ganó merecidamente su lugar en la historia de España

Con motivo del 300 aniversario del nacimiento de Gaspar de Portolá i Rovira (1716-1786), en Os de Balaguer, la Delegación de Barcelona de la Real Liga Naval Española, que preside Salvador Molist i Serrano, auspició un viaje a la ciudad de Lleida, organizado por su Delegado Antonio Guiu.

Comenzando por Iglesia de San Pedro Apóstol, un templo barroco del siglo XVIII, en cuya cripta descansan los restos del militar, cartógrafo, explorador y fundador de las ciudades de San Diego y Monterrey, en el territorio entonces conocido como Nueva España.

La visita a la exposición : El mundo de Gastar de Portolá i Rovira, patrocinada por la Diputación de Lleida y el Instituto de Estudios Ilerdenses, tuvo como anfitrión el historiador Josep Lluis Ribes Foguet, que nos fue descubriendo un personaje casi olvidado por la historia oficial, en momentos clave para la consolidación de los derechos de la Corona de España sobre toda la costa del Pacifico, haciendo frente al expansionismo ruso y británico.

Se encuentra situada en la sala Montsuar, parte de un antiguo hospital de reminiscencias góticas, estando abierta al publico hasta mediados del mes de febrero, exponiendo en una serie de paneles “el Diario Histórico de los viajes de mar, y tierra hechos al norte de la California de orden del excelentísimo señor marqués de Croix, Virrey, Governador, y Capitan General de la Nueva Efpaña: y por dirección del Illustrissimo señor D. Joseph de Galvez”.

El viaje esta representado través de una excelente cartografía, monedas, pinturas, modelos navales y armas de la época, complementado por un excelente video documental. Las peripecias vividas por este singular personaje, que presto sus servicios en Italia y Portugal, hasta que en 1764 partió hacia América, los autores de la época lo describen como “un bastísimo continente, ignoto hasta el año 1492, cuando lo descubrió primero el insigne capitán Caitoval Colombo, genovés de nación, con ayuda de la reyna doña Isabel, después que otros potentados no atendieran sus razones etc”.

La exploración de la costa californiana, puso de manifiesto que el éxito de la misión no hubiera sido posible sin la colaboración de la Real Armada, con los paquebotes San Carlos y Príncipe ambos de 16 cañones, construidos precisamente en las costas de Nueva España, aunque las relaciones entre Galvez y Portolá no fueron todo lo satisfactorias que hubieran tenido que ser, se pudo organizar la expedición.

Esta partió de San Diego en 1769, dividida en cuatro secciones dos por la mar y las otras dos por tierra, esta ultima comandada por el mismo Portolá en compañía de fray Junipero Serra, evangelizador de lo que hoy es conocida como la alta y la baja California.

Concluida con éxito la expedición, tras fundar la ciudad de Monterrey y la misión de San Carlos Borromeo, la conquista del territorio fue el fruto del esfuerzo humano y material de las misiones de la baja California y la ayuda de los hombres destinados a pacificar aquellos territorios, entre ellos la Real Compañía Franca de Voluntarios de Catalunya, enfrentándose a las tribus indígenas, comanches y apaches.

Portolá regreso a España en 1771, con una licencia especial para solventar asuntos domésticos, sirviendo primeramente como agregado al Estado mayor de la plaza de Barcelona, regresando a América en 1775 como gobernador de Puebla de los Ángeles en 1776.  En 1778 regreso a Lleida, ocupando el cargo de teniente del rey, falleciendo en esta ciudad el 10 de Octubre de 1786, legando todos sus bienes a beneficencia.

Sin embargo, su memoria inmortalizada bajo la forma de esculturas y placas conmemorativas en Catalunya, a nivel nacional se le recuerda poco, cuando fue ni más ni menos que el conquistador de California, un personaje, cuya familia seguidora de los Austrias, sirvió con lealtad y grandeza a los Borbones, un militar del siglo XVIII que se gano merecidamente su lugar en la historia de España.  (Albert Campanera i Rovira)


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