El pasado lunes día 14 un avión comercial de la compañía brasileña TAM Airlines, que realizaba el trayecto entre Madrid y São Paulo (Brasil), recibió la orden de regresar al aeropuerto internacional de la capital de España debido a una amenaza de bomba. El vuelo JJ8065 había partido del aeropuerto Adolfo Suarez Madrid-Barajas a las 21:21 horas (locales), pero tras casi dos horas de viaje recibió la advertencia desde el control aéreo de Madrid de que había una creíble amenaza de que a bordo había una bomba, por lo que se ordenó al comandante regresó al punto de partida. En el momento del aviso el aparato de la compañía brasileña, modelo Boeing 777-32W/ER y matriculado PT-MUG, volaba sobre espacio aéreo de Marruecos, y acababa de sobrepasar Casablanca.
Mientras el avión comercial daba la vuelta, el Ejército del Aire, informado de lo que estaba ocurriendo gracias a los suboficiales del Ejército del Aire destinados en los centros de la Red de Navegación Aérea de ENAIRE, ordenaba un scramble, para que un avión de combate escoltase al avión comercial a su entrada al espacio aéreo nacional español, de acuerdo con los procedimientos vigentes en la aeronavegabilidad en España.
Así sonaba la sirena en el barracón de alarma de la Base Aérea de Albacete, donde dos pilotos y el correspondiente personal de mecánicos de lanzamiento y armeros del Ala 14 y en un tiempo inferior a los 15 minutos ponían en el aire uno de los dos Eurofighter que están siempre listos para actuar. Minutos después, ya sobre espacio aéreo de soberanía española, el cazabombardero interceptaba discretamente en vuelo al avión comercial y le acompañaba camino del aeropuerto madrileño, donde aterrizó sobre la 01:30 locales (00.30 GMT), ya del martes día 15. Todavía durante unos minutos el Eurofighter evolucionó sobre la principal infraestructura aeronáutica de España, mientras que en el suelo las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado se hacían cargo de la seguridad de la aeronave comercial. El incidente, que motivó que las pistas de aterrizaje estuvieran cerradas durante una hora, se saldó sin más consecuencias, tras comprobar que era una falsa alarma.
La presencia de los modernos 777 de TAM, el que se vio envuelto en el incidente lo entregó Boeing a TAM en diciembre de 2012, cubriendo la ruta entre Madrid y el brasileño aeropuerto internacional de São Paulo-Guarulhos es bastante reciente, ya que hasta hace poco más de un mes, se realizaba con los Boeing 767. Los incidentes de amenazas de bomba, sin ser habituales, tampoco son aislados, así el domingo día 20, otro Boeing 777,en este caso de Air France, que cubría la ruta Isla Mauricio y París, debía aterrizar en Mombasa (Kenia) tras identificarse una supuesta bomba, que al final resultó también ser falsa. (Julio Maíz Sanz)
