La participación española en la estabilización del país árabe se extenderá a la reciente iniciativa de la OTAN, NMI (NATO Mission Irak), que empezará a funcionar a pleno rendimiento durante la primera parte de 2019, aunque en su puesta en marcha ya está trabajando el ET (Ejército de Tierra). La idea de poner en marcha la nueva MMI surgió durante la Cumbre de la OTAN celebrada en julio de 2018 en Bruselas. Como detalla el Boletín Tierra, órgano de prensa del ET, se trata de una misión de adiestramiento y asesoramiento, un aspecto que también contempla la actual operación Inherent Resolve, de la Coalición Internacional, que comenzó en 2014 bajo el liderazgo de Estados Unidos, y a la que España se incorporó a principios de 2015.
Con la derrota en el ámbito de guerra convencional de los terroristas islamistas del Daesh, que llegaron a ocupar buena parte del territorio iraquí, se abre una nueva fase en el conflicto de tipo asimétrica, que ha llevado a la OTAN a crear una nueva misión de asesoramiento y fortalecimiento de las grandes estructuras de las Fuerzas Armadas y de Seguridad iraquíes. Así mismo, la misión tiene como objeto la potenciación de las academias militares iraquíes, puesto que se considera que para «prevenir la actuación del Daesh, hay que reforzar la formación», tal como explicaba el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, en la referida cumbre de Bruselas del pasado verano.
Hasta ahora, la OTAN ha instruido a las fuerzas iraquíes en varias áreas, incluyendo la de localización y neutralización de los temidos artefactos explosivos improvisados o IED (Improvised Explosive Device) y de desminado, tanto en Irak como en la vecina Jordania. Ahora se dará continuidad a esta formación sólo en territorio iraquí, además de un importante impulso a las academias militares y policiales del país. También la misión NMI contempla realizar el desarrollo de estructuras, el mantenimiento de vehículos, la medicina militar y la planificación cívico-militar o CIMIC (Civil-Military Co-operation).
En otoño llegaban ya los primeros miembros del ET a Irak para la puesta en marcha de la misión internacional, en concreto desde octubre se encuentran allí un coronel, el jefe del Estado Mayor de la NMI, un comandante y un subteniente. Los tres están destinados en el Cuartel General de la nueva misión, ubicado en Bagdad, que liderada por Canadá dirige el major-general canadiense Dany Fortin. Se ha de tener en cuenta que esta nación de la OTAN aportará la mitad del total de componente, unos 250 militares sobre los más de 500 miembros de la Alianza implicados.
La participación españolas es también muy importante, ya que llegará a contar con unos 70 militares, que se repartirán entre el referido Cuartel General, y los instructores/ asesores y elementos de protección de la misión propiamente dicha, que se repartirán entre Bagdad y Besmayah. Las fuerzas destinadas en Besmayah se encontraran con las asentadas instalaciones de la Base “Gran Capitán”, desde donde opera el grueso del contingente que España aporta a la operación, unos 500 efectivos. Actualmente el grueso de la misión lo asumen los integrantes del Regimiento de Infantería “Garellano” nº 45, que llegó a finales de noviembre. Esta unidad que tiene sede en Munguía (Vizcaya) es la primera vez que despliega como contingente principal del ET en una misión en el exterior, desde que participó en la campaña del apaciguamiento del Protectorado de Marruecos África, y previamente en la Guerra de Cuba.
También, desde la primavera pasada, se sumó el despliegue una unidad de la FAMET (Fuerzas Aeromóviles del Ejército de Tierra) la denominada TF (Task Force) “Toro”, que integrado en una unidad del US Army prestan el fundamental misión de transporte aéreo de las tropas y material de la Coalición. (Julio Maíz Sanz)
Fotografía: Militar español supervisa el entrenamiento de los artilleros iraquíes con un obús M198. Foto: Estado Mayor de la Defensa.
