Desde que en 2011 se diera de baja el sistema de cohetes de artillería Teruel en el Ejército de Tierra, se carece de un sistema de cohetes de este tipo con el que complementar los obuses remolcados y autopropulsados. Mientras el programa SILAM (Sistema Lanzador de Alta Movilidad) planteaba la adquisición del lanzador HIMARS de Lockheed Martin adaptado a los requerimientos nacionales, no ha llegado a formalizarse y para cubrir las carencias del Ejército de Tierra, al que la OTAN solicitó hace años que recuperara esa capacidad esencial, la compañía española Expal Systems ha puesto en marcha una propuesta en torno a varias compañías españolas para ofertar un sistema de cohetes de artillería que podría estar en servicio en un plazo relativamente corto. Para ello se busca una alianza con un tecnólogo extranjero que aceleraría los plazos, en comparación con las iniciativas actualmente en curso en la Unión Europea.
Una capacidad irrenunciable para los ejércitos modernos
A pesar de su largo alcance y capacidad destructiva, a este tipo de municiones se les achacaba una gran imprecisión, sin embargo las tecnologías actuales permiten ofrecer sistemas de guiado que los convierten en valiosos activos para las fuerzas terrestres, aunando diferentes alcances, cabezas de combate de elevada potencia y kits de guiado preciso para la fase terminal.
El programa Fuerza 2035 del Ejército de Tierra contempla entre uno de sus objetivos clave la capacidad para generar fuegos con potencia, precisión, profundidad, movilidad e intensidad. La citada baja de los Teruel en 2011 implica que se esté perdiendo esta capacidad operacional clave y que la base industrial nacional no esté en condiciones de ofertarla cuando sea preciso. Además la flexibilidad de los sistemas de cohetes de moderna concepción los convierte en una herramienta valiosa para los entornos operativos actuales y futuros.
La propuesta encabezada por Expal Systems permitirá al Ejército de Tierra disponer de una capacidad y de un sistema que se ajuste a los Requisitos de Estado Mayor (REM) en tiempo, plazo y presupuesto, apoyándose en la base industrial nacional. En concreto el sistema propuesto podrá realizar apoyo de fuegos por encima de 30-40 km. y hasta 150 km. con elevada potencia de fuego y precisión, será interoperables con los sistemas de mando y control propios y de los aliados, compatible con las municiones de nuestros aliados y podrá integrarse con otros sistemas en servicio en el Ejército de Tierra como los vehículos actualmente en servicio, observadores avanzados, radios tácticas, etc.
Los plazos que plantean el Ministerio de Defensa y Expal contemplan que el sistema podría estar disponible en un horizonte temporal corto, unos tres años desde la contratación (por ejemplo, de contratarse en 2022 podría empezar a desplegarse entre 2024 y 2025). Los plazos y presupuestos ajustados así como la necesidad de minimizar riesgos aconsejan la participación de un socio tecnólogo internacional, habiéndose iniciado conversaciones con varios, pero con elevada participación de la industria nacional.
En este sentido, la oferta actual de estos sistemas incluye cohetes con alcances de hasta 150. o hasta misiles de 300 km. de alcance con guiado terminal disponibles en breve espacio de tiempo sobre los que se podría materializar un programa de transferencia tecnológica sobre los que las compañías nacionales podrían aportar nuevas capacidades en el medio y largo plazo.
Recordemos que el Ejército de Tierra se mantiene informado de los recientes desarrollos del sector, sirva como ejemplo que el Ejército de Tierra asistió en 2018 a una demostración del sistema de cohetes Astros 2020 del fabricante brasileño Avibras, interés que pudimos confirmar un año después con motivo de la feria de defensa LAAD que tuvo lugar en Rio de Janeiro, analizando entonces la oferta basada en este polivalente sistema de cohetes de artillería. Otros sistemas muy interesantes objeto de estudio serían el GMLRS de Lockeed Martin, o el PLUS de ELBIT Systems.
Programa industrial nacional
En fechas recientes el consejero delegado de Expal Systems José Manuel Fernández Bosch nos confirmaba la propuesta liderada por la compañía para ofrecer un sistema de lanzamiento múltiple de cohetes de artillería (MLRS por sus siglas en inglés)
Como adelantábamos, Expal Systems lideraría un grupo industrial nacional que estaría en condiciones de asumir un programa de transferencia tecnológica y de producción nacional eficiente. Hay compañías españolas con capacidad en las áreas de municiones, propulsión, cabezas de combate, espoletas, integración en sistemas de mando y control y en vehículos, en diseño y producción de sistemas de guiado además de capacidad de mecanizado de precisión.
El nivel de madurez de los productos con que cuentan los tecnólogos, unido a la capacidad de la base industrial nacional permitirían el despliegue en la fecha referida antes si la firma del contrato tuviera lugar en 2022 o 2023, considerando que el sistema iría entrando en operación entre 20 y 24 meses tras la firma del contrato.
Entre las firmas españolas con las que Expal Systems cuenta para este programa están Instalaza, experta en cabezas de combate, espoletas y propulsión, Tecnobit, con experiencia en el misil Spike y en simuladores, Iveco para la integración en plataformas en servicio en el Ejército de Tierra, Escribano Mechanical & Engineering y everis ADS que han desarrollado sistemas de guía precisa para cohetes de artillería así como SasCorp, que aportaría su capacidad de simulación de los cohetes y de los efectos sobre los objetivos o GMV que podría integrar el sistema de cohetes en el sistema de mando Talos.
Expal se encargaría del desarrollo de los cohetes y su integración en la plataforma, aportando apoyo en ingeniería de sistemas, un paso más en la estrategia de la compañía según adelantó la compañía el año pasado y que pasa por el desarrollo de nuevos sistemas de armas. Igualmente. (José Mª Navarro García)
Foto: Sistema artillero Astros (Avibras)
