¿Desea recibir notificaciones de www.defensa.com?
X
Viernes, 19 de abril de 2024 Iniciar Sesión Suscríbase

El Ejército del Aire “intercepta” a aviones civiles potencialmente hostiles

Una de las maniobras más delicadas que tienen que realizar los aviones de combate es la interceptación de aviones sospechosos de volar bajo el control de delincuentes o terroristas. Desde el 11S, en 2001, todas las fuerzas aéreas del mundo con capacidad de defensa aérea han potenciado sus procedimientos y adiestramientos de interceptación y conducción a zonas de seguridad de aeronaves sospechosas, internacionalmente conocidas como aeronaves renegade.

En estas operaciones se ha ejercitado el Ejército del Aire español durante los ejercicio DACEX-18, que han tenido lugar a finales de enero en las Islas Canarias. Para ello se crearon dos bandos ficticios, el primero estaba compuesto por los F/A-18 del 46 Grupo del Ala 46, que tienen sede en la Base Aérea de Gando (Gran Canaria), reforzados para el supuesto táctico con seis Eurofighter del Ala 11, que estuvieron basados en el Aeródromo Militar de Lanzarote, a los que se sumó la  fragata de Álvaro de Bazán (F-101) de la Armada. Además, un avión cisterna KC-130H Hercules del Ala 31 ha realizado labores de apoyo en reabastecimiento en vuelo y uno de los CN235 o D.4 y un AS332C1e del 802 Escuadrón, también adscrito al Ala 46,  han llevado a cabo las misiones de recuperación de personal.

Por otro lado, se creó el bando opositor con cazabombarderos EF-18 del Ala 15, un transporte táctico C295, y los C-101 del GRUEMA (Grupo de Escuelas de Matacán) de Salamanca.  Han sido precisamente estos últimos aparatos, de diseño y fabricación española, los que protagonizaban, el 23 y 24 de enero, las operaciones de interceptación simulando ser aparatos hostiles o de tipo renegade, que eran interceptados por los cazabombarderos del bando “blue”.

Uno de estas interceptaciones y conducción a la Base Aérea de Gando fue captada por nuestro colaborador Antonio Rodriguez Santana, mostrando  un C-101 en fase final de aterrizaje escoltado por un Eurofighter, seguido más atrás por otro de estos cazas europeos del Ala 11 por si el aparato hostil  intentaba dar la vuelta.

El ejercicio fue organizado por el MACOM (Mando Aéreo de Combate) y el mando y control se ha ejercido desde su AOC (Centro de Operaciones Aéreas sito en la Base Aérea de Torrejón (Madrid), si bien la  responsabilidad de la conducción táctica ha estado a cargo del GRUALERCON (Grupo de Alerta y Control) en la Base Aérea de Gando. Igualmente ha sido clave la labor de la ECAO (Escuadrilla de Control Aéreo Operativo) de Las Palmas, los escuadrones de EVA (Vigilancia Aérea) 21 y 22 sitos en el Pico de la Nieves (Gran Canaria) y Peñas de Chache (Lanzarote), respectivamente, y el GRUMOCA (Grupo Móvil de Control Aéreo) ubicado en el Acuartelamiento Aéreo de Tablada (Sevilla).

A este complejo sistema se sumó la  fragata  Álvaro de Bazán de la Armada, que cuenta con el sistema Lockheed Martin Aegis y que está actualmente asignada al MDOA (Mando de Defensa y Operaciones Aéreas). Tras el ejercicio el navío entraba en el Arsenal de Las Palmas, donde pudo ser visitado por la ciudadanía y visitantes de la Isla. (Julio Maíz Sanz)

Fotografías:

·Momento en que el C-101 “interceptado” aterriza escoltado por un Eurofighter. Foto: Antonio Rodriguez Santana.

·La fragata “Álvaro de Bazán” atracada en el Arsenal de Las Palmas, tras participar en el DACEX-18. Foto: Antonio Rodriguez Santana.


Copyright © Grupo Edefa S.A. Prohibida la reproducción total o parcial de este artículo sin permiso y autorización previa por parte de la empresa editora.