Las corbetas lanzamisiles Manabí y Loja fueron entregadas el 15 de noviembre al Ministerio de Defensa, tras recuperarlas la empresa pública Astilleros Navales Ecuatorianos (ASTINAVE) durante cuatro años. Junto con la corbeta Los Ríos, que se devolvió el pasado mes de julio, la inversión del proyecto fue de 71,5 millones de dólares y tendrán una vida útil de quince años, según indicó el gerente de la empresa, Camilo Morán: Puede parecer un monto elevado, pero cuando lo contextualizamos con lo que pudo haber costado en el extranjero vemos que nuestro país ahorró más de 100 millones de dólares.
En la ceremonia estuvo presente el ministro Oswaldo Jarrín, con el que se hizo la firma de acta de entrega entre la Institución y su Departamento, que recordó la incorporación de la Los Ríos en las maniobras internacionales Unitas 2018 el pasado mes agosto, tras diez años de no participar.
Jarrín declaró: Hemos iniciado un proceso de recuperación de la autoridad marítima para la fuerza naval y estaremos coordinando con el Ministerio de Relaciones Exteriores para presentarle al presidente la necesidad de que la organización marítima internacional tenga con el Ecuador un representante para defender el comercio y la garantía de navegación y derechos en todos los puertos. El comandante de la Armada, Renán Ruiz, indicó que con la recuperación de las corbetas fortalecerá el trabajo de protección marítima. También hizo un pedido a las autoridades para que se continúe el proceso de modernización de otras tres corbetas y de lanchas lanzamisies, así como de la entrega de nuevos equipamientos marítimos. Las corbetas fueron adquiridas en la década de los setenta en Italia e ingresaron en Astinave en el 2014. Según el proyecto, el tiempo de recuperación sería de tres años, pero duró doce meses más de lo planificado, aunque el presupuesto inicial se mantuvo, indicó el gerente.
