Tras un difícil proceso de selección, la comisión técnica organizada por la Armada Argentina recomendó al Ministerio de Defensa argentino preseleccionar a la compañía española Igeotest Geosciencies para participar en la búsqueda del submarino ARA San Juan. Se había convocado a una licitación internacional con el objetivo de disponer de ayuda privada que dispusiera no solamente de técnicos y especialistas capacitados, sino también de vehículos submarinos autónomos para el rastrillaje en el fondo del mar.
El proceso de convocatoria, presentación de ofertas y la posterior evaluación, demandó aproximadamente cincuenta días, hasta que la Armada presentó sus conclusiones, donde afirma que solo una de las ofertas se allana a lo exigido y solamente en forma parcial. La exigencia del Estado nacional comprendía dos capítulos por separado, en el primero el oferente debía cotizar la disposición de un buque técnicamente apto para la tarea de búsqueda, y en el segundo se exige la prestación del servicio de los imprescindibles robos, para realizar la relocalización una vez que el sonar del buque principal detecte un objeto importante.
Al llamado del ministerio de Defensa se presentaron una docena de firmas internacionales, nueve de ellas formalizaron sus propuestas aunque ninguna en primera instancia pudo cumplir con los requisitos exigidos. Se extendió el plazo de análisis para que dichas compañías completaran la información y documentación pertinente. Algunas empresas no pudieron cumplir con la disposición de poseer un buque específico y otra lo tendría disponible hacia fin de año recién.
La empresa Igeotest Geosciencies pudo completar las metas solamente en un renglón, justamente el correspondiente a la provisión del servicio de búsqueda con robots. Este grupo empresario se dedica a la exploración del fondo marino para emprendimientos vinculados con el petróleo y el gas, el dragado, la minería y la infraestructura marina.
El ministerio de Defensa proveerá un buque a bordo desde el cual será transportado y operado el robot junto a los especialistas y técnicos para el manejo del mismo y la interpretación de los datos relevados en las profundidades. El valor de la provisión y operación es de 3.700.000 USD, que cubre los cien días que se estima durara la misión.
Cuando se publique el dictamen de pre adjudicación, las otras compañías tienen cinco días hábiles para impugnar el dictamen, si esto no ocurre, se avanza sobre el acta de adjudicación y posterior emisión de la orden de compra. El Estado nacional afectara a la tarea al buque de investigación científica Austral, propiedad de un organismo científico nacional, pero que es operado habitualmente por marinos de la ARA, mas los técnicos de la compañía adjudicataria.
Se calcula que el buque Austral, que está actualmente en reparaciones generales, estará disponible para las tareas de búsqueda del submarino siniestrado, hacia el mes de Julio. Recordemos que el submarino desapareció el 15 de noviembre del pasado año y no se sabe nada de su paradero. (Luis Piñeiro. Corresponsal de Grupo Edefa en Argentina)
